Al
aire van los recuerdos
y a los ríos las nostalgias
A los barrancos hirientes
van las piedras de tus casas.
¿Quién te cerrará los ojos
tierra, cuando estés callada?
En los muros crece yedra
y en las plazas no hay solanas,
contra la lluvia y el viento
se golpean las ventanas.
Sólo quedan cementerios
con las tumbas amorradas,
a una Tierra, que los muertos
siguen teniendo por suya.
y a los ríos las nostalgias
A los barrancos hirientes
van las piedras de tus casas.
¿Quién te cerrará los ojos
tierra, cuando estés callada?
En los muros crece yedra
y en las plazas no hay solanas,
contra la lluvia y el viento
se golpean las ventanas.
Sólo quedan cementerios
con las tumbas amorradas,
a una Tierra, que los muertos
siguen teniendo por suya.
"Quien te cerrará los ojos". De José Antonio Labordeta.
A Perico.
Entre
el Rincon y el Ajutar
El
Rincón, el Cabezo Moro, el Mas, la Retuerta, la Nava, Entredosrios, la Masada, las Suertes, el
Riachuelo, el Campillo, el Vadillo, el Ojo, la Loma el Cornejo, la Tejeria, la Gorrumba, la Cirugeda, la Serrana, el Ventorrillo,
el Ajutar… la Canadilla, Dehesa.
Hace unos días: "Coño, maño, pues cómo voy a estar, jodido, mal. Como siempre, a días. Tengo días regulares, días malos, y días peores. Buenos de un tiempo a esta parte, ya no recuerdo ninguno. Pero en esta vida, he tenido más días buenos que malos, esa es la verdad maño. No me quejo."
Continuará.
José Luis dijo...
Hace unos días: "Coño, maño, pues cómo voy a estar, jodido, mal. Como siempre, a días. Tengo días regulares, días malos, y días peores. Buenos de un tiempo a esta parte, ya no recuerdo ninguno. Pero en esta vida, he tenido más días buenos que malos, esa es la verdad maño. No me quejo."
Continuará.
José Luis dijo...
Ya se fue el protagonista ocasional de tus encantadoras historias.
Ya se fue esa buena persona y llena de bondad que todos queríamos en el barrio.
Hace cuarenta años que junto con mi abuelo nos llevaba con el macho y el carro a vendimiar en alguna de las partidas que has nombrado dentro de los covanos de mimbre.
Ya no lo veremos más salir a la puerta de su casa y mirar al cielo.
"Tio, ¿va a llover o que?" "Pues no se maño no tine mucha gana, pero por si acaso voy a poner la terjdera en la puerta" Y así se metia en su cuarto ocuro al calor de la estufa de leña a ver lo que ponian esa noche en la televisión.
No lo veremos más y solamente quedara en nuestros recuerdos.
Descanse en paz.
Seguira siendo protagonista de muchos de los recuerdos, sera inevitable, además en unos dias o meses, cuando vuelvan las cosas a su cauce, escribire sobre él
PD Fijate, que ha sido subir al cielo, acabar la misa, dejar que las mujeres llegasen a casa, asomarse al cementerio, enderezar para arriba, preguntar por el encargao del señorito, y decirle, "anda maño, que alla bajo lo estan pasando como Viance en Marruecos, putas de verdad, que tu ya lo sabras, suelta el agua, suelta, que les llueva..."
Y tres dias que lleva lloviendo en Calamocha, gracias a él,... Dice mi padre que cuando entierran a un agricultor de verdad, a un hombre de la tierra, se nota por que al instante llueve.
Por lo demás la vida sigue, ... (Comentario)
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