Hace ya un tiempo, en aquellos días de abuelos y de la niñez… Mi tía Carmen y mi tío Álvaro, a caballo entre Calamocha, La Puebla de Valverde y Valencia, pasaban, como cada año, las fiestas de San Roque, en casa de mis abuelos allá en el Peirón.
La hermana mayor y la pequeña, eran inseparables, y los cuñados, unidos por las almendras, el jamón, la cerveza y el porrón.
Mi Tía Carmen, tenía la ilusión de regalarle una capa a San Roque, y pasadas ya las fiestas, habían quedado con la Cofradia de San Roque en la sacristía de la iglesia para concretar la ofrenda
Al regresar a casa, allá en el Peirón…
Exaltación : Redios, que mala cara traes niña
Carmen: No me hables
Xaltación: ¿Qué ha pasado?
Carmen : Menudo sofocón ahora viniendo a casa, me doy cuenta que no llevo las medidas, que si tu, que si yo, … toda tarde de un lado para otro para al final, … perderlas, ¡Che collons!
Xaltación: Pues mujer, en algún sitio estarán, andaros a buscarlas, preguntar, y si no a medir otra vez. Todos males que fueran asi
Carmen: A cáscala a la Luco podíamos irnos, no te fastidia la tía esta, ahora, después de toda la tarde de un lado a otro, de hablar con unos y con otros, de molestar, vamos a ir a decirles que hemos perdido las medidas, y que pensaran de nosotros…solo faltaría eso,… qué iban a decir, pues no es tonta la tía esta ni nada, a ver que se creen estos valencianos que nos saca a todos de casa con esta sofoquina porque tiene el capricho de hacerle una capa a San Roque y va y me pierde las medidas… que vergüenza maña, que vergüenza más grande.
Alvaro: Toma, aquí tienes las medidas, …
Carmen: Esas no son, ese no es el papel que llevaba
Alvaro: Niña, si son tres números, si fuera otra cosa, pero acordarse uno de tres números, …
Carmen: Anda, vete, no te quiero ni ver, pareces tonto tu también, la culpa es tuya,
José: Álvaro, mándalas hacer hostias, déjalas estar, que se jodan, que se la hagan al Santo Cristo que va desnudo y se jode de frio en invierno, … Vamos al corral, ya se cansaran, que te volverán loco las tías estas.
Álvaro: Mone al corral.
José: Sácate unas cervezas y unas almendras y el plato del jamón … y luego cuando baje el calor, nos iremos a la Vega los Postigos a por los tomates y hasta la hora sopar no volvemos a ver si se calman las tias estas.
Álvaro: Ya, llevo las cervezas en la mano, cuñao tenemos que sacar la caja a la calle, para cuando pase el camión, se estan acabando, salimos a una por semana, menuda sudada llevo… para no haber hecho nada.
Carmen: Res de res maño, ale tira fuera, vete, a saber que habrás hecho con el papel, tanto palique con unos y con otros, como si a los de pueblo se les pudiera dar lecciones de algo...
Álvaro: El papel ni lo he tocado, cuñada.
El disgusto que llevaba mi Tía Carmen era considerable, tenía la ilusión de ofrecerle una capa a San Roque, había hablado con unos y con otros, aquí y en Valencia, conseguido las medidas, pensado como hacerla, la más bonita de todas sin duda, y comprometido a tenerla lista para que el Santo la estrenase el año siguiente,… Y fuese lo más comentado de la procesión, en lugar de la “dijenda” en que llevaba camino de convertirse.
Y ahora le faltaban las medidas y la vergüenza necesaria para volver a pedirlas, … Su hermana mayor, mi abuela, no paraba de indizcarle, y a cada frase que decía, la hundía un poco más, disfrutaba sin duda, toda ella un cumulo de socarronería
Exaltación: Pues vaya una forma de hacer el paripé,… pues vais a quedar como Cagancho, … dirán, estos valencianos que vienen aquí a enseñarnos hacer paella, … menuda sanantonada, … ¡que par de tontos la virgen! no voy a poder salir de casa hasta navidad.
Hasta que se canso de hablar y ver a su hermana a punto de llorar,…
Exaltación: En fin, maña, más se perdió en Cuba, que sea lo que dios quiera no le des más vueltas, apáñate con las medidas que te ha dado Álvaro, total el santo no se te va a quejar, ni por corta ni por larga, ni por bonita ni por fea, ni nadie te va a decir nada, que a caballo regalado, … eso si tu coges la más bonita y más cara, bordada en oro y veras que bien, y más vale que sobre que no que falte, y si no mira ( le dijo señalándome a mi ), San Roque y el chico van parejos, no será más grande uno que otro, vamos que son iguales, ahí tienes las medidas.
A mi Tía Carmen le cambio la cara,
Carmen: A ver Jesusín, ponte de pie, date la vuelta, anda un poco, a ver, … coñe maña, sabes que si lo subes en una peana es lo mismo que San Roque, calla, ya veras, … donde tienes el metro, venga trae, y un papel y un boli, y tu, ale cariño, mone pucha encima la taula.
Un año después…
Llegado el verano, y con él los veraneantes, llegaba San Roque, y mis tíos también … la capa ya estaba lista. Así que a mi abuela, al verme le falto tiempo:
Exaltación: Carmen, saca la capa de la caja y vamos a probársela al zagal por ver que tal sienta, mejor que la estrene el que es de casa, que uno de fuera como San Roque no te parece
Y así fue, me colocaron la capa y me hicieron subir al rellano de las escaleras para verme desde lo alto.
Mi abuela, la satisfacción personificada, debió de decir algo así como “redios maña, que bien le sienta al niño, que guapo esta y que bonita es”
Carmen: Ya puede ser bonita ya, con lo que ha costado, …
Xaltación: Qué bien cosen las monjicas y que gusto tienen para estas cosas, le viene que ni pintada, les darías propina
Carmen: Si, seguro, buenas son las jodidas, …. Y un ojo de la cara también les di. Pero yo se la veo un poco pequeña, no sé, un dedo más hubiera sido mejor
Xaltación: Date, date la vuelta que te veamos y anda un poco. Eso es que habrá crecido el chico, pero tranquila, San Roque no habrá crecido, le valdrá.
Carmen: Copón bendito que par de tontas que somos
Xaltación: Maña, que no es la cosa así.
Carmen: Pues no le va a estar bien la capa al chiquillo si son sus medidas, o es que ya no te acuerdas que lo subimos a la mesa y lo medimos… mecaguen el turrón, veremos si a San Roque le queda la mitad de bien, o se la tienen que poner al perro, que solo falta que no le esté bien… que jodienda todo el año pendiente de esto, una y no más Santo Tomás.
Xaltación: Calla tonta.
Carmen: Venga, quítatela, la meto en la caja, la llevamos y me olvido de todo, que igual le viene larga que corta, … La Mare de Deu que sin vivir llevo este año con la dichosa capa, harta estoy, de verdad te lo digo.
Xaltación: Tranquila niña, que San Roque va a caballo y no se manchara de barro, … y el no se te va a quejar, … y la gente nada puede decir por qué es bonita de verdad. ¡Quieto ahí tú, no te bajes, ni te la quites!
Y mi abuela se levanto, se santigüo y su hermana la miraba con extrañeza, e hizo que se santiguara también, que se levantara del sillón “pero estas tonta o que, que vamos a rezar el rosario ahora, o le vas a echar un dicho y bailar, cualquier cosa, que tía esta”, y así fue, la Xaltacion se puso a rezar, con su nieto como santo, responso, dicho, incluido, pero no bailo y dijo para terminar:
“Y la capa te protegerá
a lo largo de toda tu vida”
Carmen: Mare de deu tu, haces la de aquel, que mientras tenga vida, no se muera.
Xaltación: Mone maña, que ya está bien, recógela, y dásela al cura o a quien sea, que se la queden… y sino el chiquillo ya tiene capa, habias de darsela que bien le sienta y guapo esta
Carmen: Si, seguro, para él iba a ser
Xaltación: Pues bien guapo esta o no
Carmen: Chica olvídame, que se la queden y descanso.
FIN
PD La capa en cuestión no es la que lleva San Roque en la foto ( año 2009 )
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