martes, 27 de abril de 2010

El Mosén, el Guardia Civil, el Matarife y yo.


Recuerdo todo esto que ya creía olvidado porque en unos días, seré yo el testigo… aunque no terminen de ser la cosas conforme dios manda.

Así casándote por la iglesia, llega un momento en el cual debes pasar por la parroquia acompañado de testigos, con el fin, de solventar el papeleo de cara al juzgado.

Hace unos años un domingo por la tarde nos acercamos a la casa del cura, a tomar café, rellenar y firmar los papeles.

Mosén: Bueno, terminamos ya, datos de los testigos que me faltan, venga, Pedro, que profesión tienes.

Pedro: Guardia Civil.

Mosén: ¡Virgen del Pilar!, ¿no vendrás armado?, no estarás coaccionando al novio.

Pedro: No, no…

Mosén: ¿Y tú Andres, a parte de aparcar en la puerta de mi casa, recordarte que es la casa de Dios, qué profesión tienes.?

Andres: Matarife.

Mosén: ¡Santo Cristo L´Arrabal!

Andres: O matachin, o matapuercos.

Mosén: Deja, deja no lo arregles, Un guardia civil y un matarife como testigos, …


Mosén: Esto puede dar que pensar, … quien va a creer que el novio viene por su propia voluntad a casarse con tales guardaespaldas de referencia.

Menos mal que esto no lo lee ni dios… si se lo leyeran no se iban a creer que fuese un matrimonio voluntario, llegando el novio acompañado de la Guardia Civil y un Matarife, ya me dirás tu.

Hombre lo de Pedro, se podría arreglar, suavizar, si dijésemos Agente de los Cuerpos de Seguridad, pero no me cabe, y además Andres, lo tuyo, es que no tiene arreglo, no hay otro nombre, es lo que es.

Andres: No hay problema, digamos que soy Jefe de Planta, o mejor Gerente

Mosén: Cállate hablador, mentir es pecado, lo dejamos en Guardia Civil y Matarife, al fin y al cabo es la verdad, y hasta suena romántico.

Pasados unos días, el Mosén llamo a casa, la boda no podía celebrase, los papeles estaban paralizados en el Obispado, en el Supremo, en el Constitucional, en el Vaticano, o simplemente en Calamocha, estaba claro que los iban a echar para atrás desde el primer momento…
Sin embargo, no era culpa de los testigos, que un Guardia Civil y un Matarife llevaran a uno a la iglesia, cabía dentro de lo normal, cosas peores habrán visto.

La culpa era del novio, mía, ya que en los juzgados eclesiásticos, o donde fuese, constaba como casado. Solo por eso, no podía casarme. Pero eso ya es otra historia.

Mosén: El caso es que está casado, de eso no hay duda, es mi letra, yo lo case, … se me iría el Santo al Cielo, y ahora me tocara remover Roma con Santiago para corregirlo, pero bueno, me pongo a ello y lo arreglo, lo descaso, caso al otro y lo volvemos a casar al uno y al otro, cada oveja con su pareja, … cuando les mande todo, se van a poner contentos.

Por cierto, si puede, que traiga otro pozal de veneno para las ratas, no ha quedado ni una, y se está terminando, con un poco más matamos hasta al demonio.
PD El Mosén en justcia era Don Alejandro.

viernes, 26 de marzo de 2010

Los pies descalzos del Nazareno.


Cuando años atrás el Santo descansaba sobre la peana, bastaba con acercarte a él, encaramarte a ella y tirarle de la barba, para pedirle aquello que necesitases. Ahora que descansa sobre el carro, cuando quieres pedirle algo, recostado sobre las faldas, le tiras de las sayas, le tocas los pies...


Ya no recuerdo lo que le pedí el año pasado, clara señal de que nos lo concedió.



Los pies descalzos del Nazareno.





La familia Nazarena a su Hermano Mayor.


Inoncencio.


Nazareno, agricultor, charrador, contador de historias, tratable, (no hay palabra más bonita), soldador, electricista, carpintero, lo que hiciera falta, presto y dispuesto, sonriente, emprendedor, incansable, pensador…



“Buena la hicimos, nos podían haber tocado un par de yuvadas de tierra a cada uno en la vega, o alguna finca buena, o un cuebano lleno de zafrán, … pero no, nos fue a tocar en herencia el Nazareno, tocáte los pies, así que, maños, eso os dejaremos, ...no es culpa nuestra, ni de él tampoco,... el que venga detrás que arree”.

"Arreando"


La Esquina de Inocencio.


Hay lugares que no tienen nombre pero todo el mundo sabe cómo se llaman y donde están: La Esquina de Inocencio en el Rabal es uno de ellos. Cada vez que miras, esperas encontrar, buscas con la mirada el John Dhere verde aparcado listo para arrancar camino de los campos olvidados, de la vega y el yermo secano, verlo como años atrás, cuando éramos niños.

Pero no está, hace tiempo que no está, hace tiempo que dejamos de ser lo que eramos… quieres verlo pero no puedes, como si el tiempo no hubiese pasado para ninguno, como si todo siguiese igual, hoy ya solo es un recuerdo.


Había jaleo en Roma, siempre asocié una cosa con la otra, un Papa, otro Papa, y nosotros, huérfanos de responsabilidad, consumíamos las tardes finales de aquel verano jugando al monopoly en la Esquina, si había o no fumata, si lo habían o no matado, si reia, ahora miro y me doy cuenta, era el año 1978.


Es uno de los primeros recuerdos que tengo, … luego, vendrían otros muchos.

Las tarde finales de verano, novena en el Santo Cristo y nosotros detrás del tractor de Inocencio recogiendo patatas, hoy en la Gorrumba, mañana en el Ojo, Entredorrios, el Rincón, el Riachuelo… “Que si Perico, lo que sea menester y lo que tu digas, pero deja los machos en casa, que en los cornejales, tambien entra la máquina”.




El Santo Cristo, las Monjas, la peana que pintara Valero “Vitos” Rando, que pesaba como un muerto, el habito viejo, las barbas del Santo, Agapito y su quinta, nazarenos antes que nosotros, el pelo también, la batería del tractor, la carbonera de la sacristía, las ruedas de la máquina de sacar patatas, las primeras que llevo el carro del Santo, de ahí las buenas cosechas que año tras año había, aunque no las pagaran, pero eso, ya no tiene importancia, ni culpa era del Santo, las otras eran de un viejo carretillo que andaba por el pajar de casa, las luces, el taladro, la soldadora, la bici, el perro, o es perra, los postreros paseos con mi padre, el uno hablando del tempero y el otro de ovejas … y la trápala del Domingo de Ramos que daba comienzo a la Semana Santa, las flores, las luces en la cara del Nazareno, vestirlo, peinarlo y los tediosos jueves santos del forastero, preludio del día grande, de la Procesión del Viernes Santo.




A mediados de los ochenta la tranquila y familiar Semana Santa calamochina a juzgar de muchos, agonizaba, no había relevo, al parecer no tenia encanto alguno… lo cierto es que al Nazareno nunca le ha falto de nada, ni entonces ni ahora.

Jamás se quejó.



Que si esto, que si lo otro, que si lo demás allá, algo se movía… y en una de aquellas se cambio el trayecto de la procesión, a ver que sale, debido de pensarse, el clásico recorrido del Viernes Santo se olvido y el Nazareno aquel día vio medio pueblo, calles por las que jamás habría pasado… para rematar, al llegar a la iglesia, … El Sermón de las Siete Palabras, a razón de media hora por palabra, … allí sentados en el órgano cogía toda la Cofradía, padres e hijos, cansados, cavilando.




Aquel día solo falto subir peana al hombro la cuesta de Zuriaga, “hubiera sido el colmo, y lo más sensato haberlo tirado a la Cerrada Sancho y puesto fin a todo” ya por la Calle Jose Antonio nuestros padres no podían más, Nosotros todavía no nos vestíamos, pero salíamos junto al Santo llevando los palos para los descansos, … “si la Semana Santa va a ser esto, tambores y penitencia, música y paseos, no sé que pintamos aquí, que se vayan todos a tomar,..Me callo porque está el Santo nuestro delante, nada hemos hecho para tanta penitencia, nosotros no…”





Aparcado por fin el Nazareno en el Coro de la iglesia, Inocencio, el palo delantero derecho, hablo por todos, le tiro de la barba y le dijo:


Mira maño, que sordo no estás que lo sabemos, escucha, dos cosas, la una, que así no vamos a ninguna parte, o haces que vuelva la procesión por donde toca o esto se acaba y luego, la otra, que nosotros ya nos hacemos mayores, no te lo tomes a mal, pero al año que viene te llevaremos en carro, no sé cómo lo haremos, ni como quedara, ni que dirán, pero me da igual, tu iras en carro, el mejor que podamos, y el que venga detrás que arree, serás el primero, nosotros empujando te llevaremos a donde sea menester, pero lo del hombro, se ha acabado, y si nos concedes las dos cosas, mejor aún, ale, ya mandaras razón, que ya sabes donde estamos.


Lo que paso después, ya es conocido…






Canta José Antonio Labordeta, a modo de despedida:


Ya ves, que vamos avanzando,
cumpliendo este camino.
No lo sé, ya ves.


Ya ves, que vamos recordando,
creciendo hacia el ocaso.
No lo sé, ya ves.

Ya ves, qué pálidas palabras
se pierden en la noche
sin hallar solución.

Ya ves, que hemos ido surgiendo
de inciertas y duras voces
de desesperación.

Recuérdame,
como un árbol batido,
como un pájaro herido,
como un hombre sin más.

Recuérdame,
como un verano ido,
como un lobo cansino,
como un hombre sin más.

Ya ves, que fuimos agrietando los muros mantenidos.
No lo sé, ya ves.

Ya ves, que estamos añorando unos niños perdidos.
No lo sé, ya ves.

Ya ves, qué voces diferentes se cruzan en el alba, buscando la verdad.
Ya ves, que fuimos puente herido, de abrazos detenidos, por ver la libertad.

Recuérdame, …



Entre Nazarenos…





San Pedro: Adelante Inocencio, adelante estás en tu casa.


Inocencio: Un poco pronto, no crees, donde está el Nazareno.


San Pedro: Te está esperando. Que zapatos más bonitos llevas.


Inocencio: Y esas sandalias tuyas, aún son las primeras, malo.


San Pedro: Me cambias los zapatos por las sandalias.


Inocencio: No


San Pedro: Venga, hombre.


Inocencio: Ni aunque me des las llaves del cielo, además de las sandalias, no hay cambio, donde está el Nazareno. He de hablar con él.


San Pedro: Allí, arriba, el que está sentado a la derecha, todos los caminos llevan a él.


Inocencio: Bien, gracias, avísame cuando llegue alguno conocido, sin prisas maño.




Inocencio: Buenos días, eres Jesus de Nazaret


Jesús: Si


Inocencio: Me entiendes lo que te quiero decir, eres de Nazaret, no eres ningún mandao, ni criado, ni forastero… eres Nazareno.


Jesús: Si


El resto es fácil de imaginar, Inocencio se subiría a la tarima, aupado sobre sus zapatos para no pisarse el habito, y le tiraría de la barba, al tiempo que le recriminaría tan enorme crueldad, como ha sido el haberlo llamado a dos semanas de la procesión del Domingo de Ramos la tarde, la más bonita de todas, …


Inocencio: ¿Qué no daba igual un día que otro, una semana que otra?, ¿sesenta años tirando del palo delantero derecho del Nazareno, no han sido bastantes para haber habido uno más?... después del invierno de frio que ha habido, ahora que llegaba el buen tiempo… pero hombre, … con lo que te he cuidado allá abajo… quedar mal por quince días, chico que barbaridad, que cabreo he cogido, total maño, ya me dirás que urgencia tenias, que falta te hago yo aquí en estas fechas....


El Nazareno : Como iras viendo, Inocencio, en el cielo como todos los sitios, te daras cuenta, está lleno de catedráticos, ingenieros, doctores, señores, … que saben mucho de todo, estudian, inventan, organizan la casa ajena, … pero nunca les puedes pedir nada. Lleno también de curas, beatos, cofrades, … de los que mucho rezar, y poco, tu ya me entiendes, que si te descuidas, se te vienen descalzos y al pobre de San Pedro, le toca dejarles las sandalias… y luego están las personas normales, los trabajadores, los agricultores, …la gente sencilla, entre ellos tu, siempre a todo dispuestos. Bienvenido. En cualquier caso, Inocencio, como tú, no tengo a nadie. Créeme, a nadie. Siéntate aquí conmigo, en esta tu esquina y descansa. Luego, ya le echaras una mirada a esas luces por ver si las puedes arreglar, no veas, la de gente que ha venido y no ha sabido, … pero tranquilo, tenemos tiempo.


Inocencio : Una eternidad, majo, pues nada venga, hazme sitio, donde se está bien, buen rato. Mientras no me mandes a sacar patatas.


El Nazareno : Seria una pena con esos zapatos tan bonitos que llevas, yo voy descalzo...


Inocencio: Calla, son míos, no se los doy ni a Dios, por cierto donde está, no lo veo.


El Nazareno : Tardaras en verlo, con la que está cayendo no está para nadie.


Inocencio: Santo Cristo L´Arrabal, a buen sitio he venido a parar, esto parece la casa de tócame Roque.


El Nazareno : Tranquilo. Mi padre vendrá a verte, el te ha llamado y seguro le apetecen tus …


Inocencio: Cállate, te tirare de la barba majo.



“El que venga detrás, que arree”




FOTOGRAFIAS AÑO 2009


ADIOS.


28 de marzo de 2010. Domingo de Ramos.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Setas de Chopo.

De vez en cuando alguien repara en la foto, una ampliación de 30 por 40, de color amarillento, tomada al caer la tarde con una cámara de aquellas de usar y tirar en los años 90.

La mira y me pregunta ¿Dónde está ese camino, me es familiar?

Pudiera ser, pero es complicado, están en el Ventorrillo, allá en la Serrana, camino del Tormo. No eres el primero que cree conocer el lugar, esa fotografía tiene algo no sé el que, que yo no veo….
Pero otros como tu ven. En Calamocha.

Y en aquellos chopos setas, de los de arriba y de los de abajo, setas a la caldereta y a casa, a guisarlas con tomate y cebolla, … como siempre de las setas se han oído tantas cosas, a la hora de cocinarlas las abuelas ponían en la cazuela una perra gorda o un real, limpio como una patena, y si este tras el guiso, salía enrruminao, sucio sin más, se entendía que entre las setas había alguna no comestible.

Nunca se dio tal caso.
 

RECETA

Setas de alpaca con bacalao, cebolla y tomate.
Patricio y Calamardo, atentos, nos vamos al Mercadona :

Setas de alpaca, una bandeja, Migas de Bacalao una bolsa, una lata de tomate natural, sin freir, y ale, a casa.


Lavar las setas y trocearlas


Cortar la cebolla a trocitos



Poner la sartén al fuego con un par de cabezas de ajo


Colocas en la sarten la cebolla, la sofries un poco y luego añades las setas, y a fuego lento. Y le metéis una moneda de dos euros recién salida del Banco de España o mejor de un país solvente porque estas setas aunque compradas, de naturales más bien poco.




Partes el bacalao en trocitos


Preparas el tomate




Cuando ves que las setas y la cebolla están ya casi hechas, añades el bacalao y el tomate


Sigues a fuego lento hasta que veas que el tomate esta frito y listo.


Y a esguazar a tutiplén cual Lucas Trapaza en Flandes al toparse con un par de bolas de queso holandés en el fragor de la batalla.

lunes, 22 de febrero de 2010

El Trajon.

Cientos de pollos.

Muchos más conejos que pollos, por aquello de que se comia paella los domingos.

Algún que otro gallo, cantador a destiempo, traidores de los que se tiraban a picar, acosadores de gallinas, a los cuales atarles las patas, para que dejasen de incordiar, no era suficiente, muertos todos antes de su hora, de San Isidro, San Roque o Navidad.

Alguna que otra gallina vieja y hasta culeca.

Algún que otro auco, pato, pavo… grajo, cuervo, picarazo…. Los menos

Muy probablemente cientos de tocinos, ….

Habrán pasado por el Trajon, para su despiece.



martes, 2 de febrero de 2010

La bici nueva.

Navarrete octubre de 2009
Coño de estreno estoy, nueva esta la bici, como el primer día, ya lo creo que sí, la mía la tengo jodida, a ver si la arreglo, que de cuatro zapatas llevaba solo una, pero años ya, y eche a frenar y no pude, me medio pegue una hostia que casi me estozolo, tuve que echar los pies abajo, la muy puta que susto me dio, pa haberme esnucao de cualquier manera…
Y este, el vecino, que me vio, que bajaba por allí, de dar vuelta, me dijo, “te vienes por casa y te coges la de mi padre hasta que la arregles, que a ti vendrá bien, y a mi solo me hace estorbo que cualquier dia la cojo, la ablento y un zarrio menos”.
Así que le dije ieh, co, echa el freno, que para tirar siempre hay tiempo, no es menester, ya iré a por ella después de la partida. Pero que no sería de su padre que sería ya de su abuelo, como la mía, quintas, lo que pasa que así encarnada luce mucho parece otra cosa, pue que tenga cerca cien años.

Y fina que es la colorada, la madre que la pario, vamos que no hay chaval de veinte años que tenga cojones a bajarse a Calamocha con ella, que a mitad de puerto, tira la bicicleta a tomar pol culo y se va andando, que se caga vamos, que pesa como un muerto y en cuanto le tiras el pedal para atrás, se frena la puta de ella, que hay que ir con un cuidado de tres pares de cojones.

Con que eso te puedo decir, en cuanto tenga tiempo le cascare a la mia unos frenos con algún trozo de goma que haya por ahí y le hare unas zapatas como dios manda, porque ahora no se que cojones pasa que vas a comprar zapatas y en ningún sitio tienen, que te venden la bici entera, hala a cascala a Luco , a chiflar a la vía, la Virgen del Pilar, cuanta tontería tenemos hoy, …la arreglo y tengo avio para unos cuantos años, vamos que con ella me voy a Santa Margarita, ya lo creo que si, …




PD Ayer, en una conversación dije "estozolar", ... nadie me entendio, lo explique, fui al diccionario, "esnucarse", ... y creo que la ulitma vez que lo oi fue a prosposito de la bici nueva, alla en Navarrete... Ahora bien, porque ayer me vino a la cabeza es un misterio.
"Tener cuidado, debeis de darle en el momento justo porque si no el Pato Lucas se estozola y hay que volver a empezar".

viernes, 22 de enero de 2010

El Polvorín.

Ahora que llega San Blas, con su hora y más, ahora que alarga el día, ahora, como cada año, , en el camino, vuelvo a recordar, cada día de vuelta a casa, inevitablemente el Polvorín del Vadillo vuelve, allí junto a la pieza, las patatas, el maíz, el trigo y la cebada y hasta un año, barbecho el Ventorrilo, el hortal,… su generosa sombra…

Veo en el camino otro Polvorín hermano de aquel, de aquellos de cuando la guerra, iguales en todos pueblos, guardaban la “pólvora”, que no se mojase…con el tiempo pasado ya reconvertidos, en palancas, en casetas de aperos… en residencia improvisada la que todos días, la luz camino de San Blas, me deja ver, camino de vuelta a casa.

EL Polvorín.

La foto es de principios de los años 90. Y la verdad deja bastante que desear, … no me salió muy allá, no era cuestión de hacerle media docena de retratos, en aquellos días la fotografía era un entretenimiento caro, bastante caro. No como ahora, que hacer una foto es ya no barato sino gratis,… será por eso que no se hacer ninguna que merezca la pena.
PD La cosa esta que arde.
NOTA:

De entre la media docena de lectores del Blog, cinco si no me cuento yo, esta nota va dirigida al Nazareno de Valencia.

En la última entrada del año 2009, Las Historias del Perrito Perdigón y en concreto en :
Cosas de críos.

Erase una vez cuatro pastores, cuatro…

Una noche recuerdo que estábamos cuatro pastores en el Barbete, encima de la Gorrumba: José el Jorjo, su primo Antonio, Vicente y yo.

Resulta que uno de los protagonistas fue tu padre … el mundo es un pañuelo.

Recuerdos

JESUS